La guerra en la F1 continúa entre bastidores

En Nürburgring la guerra entre la FIA y la FOTA continúa entre bastidores, lejos de los focos, con un mensaje claro: Bernie Ecclestone y Max Mosley han sido progresivamente excluidos de las negociaciones. Según varias fuentes, la FOTA habría aprovechado la metedura de pata pública de Ecclestone sobre los regímenes totalitarios para evitarlo y tratar directamente con CVC, la empresa que posee los derechos comerciales de la Fórmula 1.

Un acuerdo entre las dos partes podría ser inminente y en ese momento podrían presentarse ante Mosley y Ecclestone con los juegos ya terminados: los dos no tendrían, por tanto, otra opción que firmar o, en caso de negativa, iniciar la división.

En cambio, una teoría más compleja afirma que la FOM de Ecclestone también estaría de acuerdo con la FOTA y la CVC, por lo que sólo la FIA quedó aislada debido a Mosley.

La F1 está vinculada contractualmente a la FIA, pero CVC podría llevar a la Federación a los tribunales alegando que las ideas de Mosley están dañando su negocio. Otro rumor no confirmado afirma que la FOTA redactó una carta de renuncia para Mosley. Si lo firma el presidente, se lograría una rápida solución a la crisis.