Pirelli: neumáticos P Zero Medium y Soft para el Circuito de las Américas

Pirelli – El Circuito de las Américas, en Texas, es una de las pistas más nuevas del Fórmula Uno, inaugurado apenas en 2012. Por primera vez, Pirelli ha decidido traer aquí compuestos medios y blandos (en años anteriores había traído compuestos duros y medios).

Esta versátil elección para 2014 pretende hacer frente a las diversas exigencias de la pista, caracterizada por tres largas rectas y numerosas curvas técnicas. Estas incluyen la curva 1, una horquilla de radio constante que pone mucha energía en los neumáticos, y otras curvas con cambios rápidos de dirección, que recuerdan un poco a Silverstone o Suzuka.
Con sus 20 curvas y sus diversas variaciones de altitud, Austin es un circuito verdaderamente desafiante: pensemos, por ejemplo, en las frenadas cuesta arriba después de la salida, que dificultan encontrar el punto de frenada adecuado. Estos elementos lo convierten en un circuito realmente apasionante, amado tanto por los pilotos como por los espectadores.
Después de Estados Unidos, los equipos se trasladarán directamente a Brasil para competir el 9 de noviembre en Interlagos, circuito en el que se optó por los mismos compuestos: medio y blando.

Paul Hembery, director de Pirelli Motorsport: “Estados Unidos es un mercado clave para Pirelli. Así que estamos muy contentos de volver a Austin que, además de ser una gran ciudad, también es un lugar fantástico para correr. La pista tiene ahora tres años, por lo que, en teoría, debería ofrecer mayor agarre que años anteriores. Con neumáticos medios y blandos esperamos dos paradas, pero habrá que esperar a los entrenamientos libres para confirmar nuestras previsiones. Mucho dependerá de las condiciones climáticas. Aunque la carrera se disputa en noviembre, se esperan condiciones cálidas pero variables: la degradación térmica será, por tanto, un factor importante. En qué medida esto influirá en la degradación y el desgaste general y, por tanto, en la estrategia de carrera, también en vista de la nueva generación de coches de este año, sólo lo sabremos allí. En los últimos años, la estrategia de una sola parada siempre ha resultado exitosa, también porque la carrera llega relativamente tarde en la temporada, momento en el que la mayoría de los equipos han entendido cómo sacar el máximo provecho de los neumáticos".

Jean Alesi, consultor técnico de Pirelli: “Austin es ante todo un circuito emocionante para los pilotos. La frenada al final de la subida tras los boxes y su horquilla a la izquierda ofrecen oportunidades de ataque. Incluso las 's' que siguen permiten líneas diferentes y la posibilidad de inventar algo con miras a atacar a un competidor. No es una pista aburrida: hay muchas oportunidades de adelantarla y esto es un hecho técnico que en sí mismo es garantía de Grandes Premios interesantes. En Austin también hay otro dato técnico importante a tener en cuenta: la notable variación de temperatura que allí se puede encontrar. En los últimos años también hacía bastante frío temprano en la mañana; pero con el sol se puede llegar al tiempo de clasificación con mucho calor en la pista. Esto puede hacer que sea complejo identificar la ventana ideal para usar el neumático: un desafío para los equipos y los pilotos que se suma a los muchos que ya están presentes en cada circuito".

El circuito desde el punto de vista de los neumáticos:

Las tres largas rectas tienden a enfriar los neumáticos, lo que hace que las zonas de frenado sean críticas. Esto también tiene efectos al entrar en curvas rápidas, ya que los compuestos tienen que volver a la temperatura muy rápidamente.

El P Zero White medium es un neumático de "rango de trabajo bajo", capaz de alcanzar un rendimiento óptimo incluso a bajas temperaturas. El P Zero Yellow soft, por el contrario, es un neumático de "alto rango de trabajo", adecuado para temperaturas más altas.
Durante el Gran Premio de Estados Unidos del año pasado vimos una gran variedad de temperaturas: de 18 a 37 grados centígrados.

La combinación de rectas y curvas requiere un buen compromiso en términos de carga aerodinámica, poniendo especial énfasis en el agarre mecánico de los neumáticos. Además de la larga curva 1 y los rápidos cambios de dirección en la primera parte de la vuelta, la curva 11 también es muy exigente con los neumáticos.

Los conductores comienzan a frenar cuando los coches entran en la curva, lo que provoca una distribución irregular de las cargas sobre los neumáticos.

La estrategia ganadora del año pasado fue una parada: Sebastian Vettel, Reb Bull, comenzó con compuestos medios y luego cambió a neumáticos duros en la vuelta 27. Los primeros 12 conductores hicieron sólo una parada.